Especulación de precios en los supermercados - Portugalhoy.com
CNN Portugal afirma que los consumidores deben tener cuidado al comprar, ya que "el precio de los productos que se muestran en el estante a menudo es diferente de lo que tendrá que pagar en la caja".
Los grandes supermercados e hipermercados modifican "reiteradamente" el precio de un momento a otro y siempre en el mismo sentido: es varias veces más caro a la hora de pagar, según Pedro Portugal Gaspar, inspector general del Servicio Económico y Alimentario. Autoridad de Seguridad (ASAE), quien subraya a CNN Portugal que los productos son casi un 70% más caros.
En los últimos meses, ASAE ha inspeccionado a 562 operadores económicos y abierto 26 causas penales por la práctica de especulación de precios que afecta casi exclusivamente a bienes alimentarios, como pasta, cereales, leche, huevos, carne y atún. "Esto merece una reflexión, principalmente porque las situaciones ocurren en grandes grupos económicos, lo que significa que esa desviación no debe ser vista como un hecho singular, sino multiplicada por el flujo de caja diario del producto", dice Pedro Paulo Gaspar.
Preocupante exponencial
Cuando ASAE identifica que un producto tiene un precio más alto cuando se paga en la caja que el monto que se mostró, la realidad debe multiplicarse por el volumen de compra diario de ese producto. “Si lo multiplicamos por el volumen de ventas, tenemos un exponencial relativamente preocupante”, dijo.
La mayor variación de precios (65,5%) se detectó en la venta de pastas en súper e hipermercados y este aumento, aunque exponencial, puede ser difícil de detectar cuando se va de compras. Primero, porque puede que tengas el carrito lleno y no identifiques que tu cuenta está unos centavos más cara de lo que debería, segundo, porque ese aumento puede estar enmascarado por la inflación, que lo ha encarecido todo.
¿Es deliberado o simplemente una falta de atención por parte de los grandes grupos económicos? “No puedo decir que fue intencional, pero, quiero decir, es una situación relativamente objetiva, entonces hay que encontrar algún tipo de justificación aquí y sacar algunas conclusiones sobre esto porque encima se reitera”, dice el inspector. - ASAE generales.
lucha radical
Para Pedro Paulo Gaspar, el análisis de estas prácticas debe tener en cuenta que estos delitos están siendo cometidos por grandes actores del sector de la distribución, con más "robustez" para enfrentar problemas de equipos informáticos o falta de seguimiento, en contraposición a un comerciante de menor escala. “Puede ser una negligencia, pero luego se deberían haber corregido los errores para que no vuelvan a ocurrir, o es un tipo de práctica que hay que combatir radicalmente”, añade.
Las irregularidades detectadas por ASAE suceden al mismo tiempo que las empresas distribuidoras han visto incrementados sus ingresos y utilidades. Mirando los resultados de las dos cadenas de supermercados portuguesas más grandes, Modelo/Continente y Pingo Doce, por ejemplo, parece que, con la pandemia y en un año de inflación histórica, registraron ganancias mucho más altas que en 2019. De enero a septiembre los ingresos de las dos cadenas de distribución superaron los 8.400 millones de euros y Jerónimo Martins, propietario de Pingo Doce, registró 120 millones de euros más en beneficios que antes de la pandemia. Sonae, que controla las tiendas Continente, ganó 39 millones más que en 2019.
Para detectar infracciones, ASAE se basa en fuentes de verificación sobre el terreno que luego cruza con fuentes abiertas e informes exhaustivos sobre una amplia cesta de alimentos con alrededor de 30 productos, que van desde productos frescos hasta carnes y pescados. Durante las inspecciones en los supermercados e hipermercados, los inspectores verifican el precio al que está publicado el producto en relación con el precio al que está registrado en la caja.
Al detectar que el precio del producto ha sido objeto de especulación, los responsables de la cadena alimentaria que lo comercializan se exponen a sanciones que van desde los seis meses hasta los tres años y una multa que, en caso de negligencia, será menor.
Suponiendo que nadie será privado de su libertad por este tipo de delito, la multa depende de "cuánto tiempo se fijó el precio, versus el precio de caja, cuántas unidades de un mismo producto se vendieron, el tamaño de la empresa y si hubo o no ganancias ilegítimas”, explica el responsable de ASAE.
En los últimos meses, ASAE también ha abierto 51 expedientes administrativos de infracción contra operadores del área comercial. Las infracciones encontradas están relacionadas con la falta de exhibición de precios, el desacato a las normas de venta publicitaria con rebajas de precios, las prácticas comerciales desleales, el incumplimiento de las prácticas leales de información y la práctica de actuaciones engañosas.
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