Solicitudes de doble nacionalidad portuguesa

Según un informe de DN, las oficinas del registro civil y los registros se han visto abarrotados de solicitudes de nacionalidad portuguesa, especialmente en agosto, en vísperas de la modificación de la ley de nacionalidad relativa a normas más estrictas para los judíos sefardíes.

Entre 2010 y 2016, los servicios del Instituto dos Registos e do Notariado (IRN) recibieron un promedio de 100.000 solicitudes de nacionalidad por año, cifra que aumentó sustancialmente en los últimos cinco años (entre 2017 y 2021), según el Ministerio de Justicia (MJ). “Este promedio anual ha superado las 160.000 solicitudes. Solo en 2021 se han presentado más de 195.000 solicitudes de nacionalidad”.

Un mal agosto

"Agosto fue el peor mes, con más de 3.000 solicitudes por día. Además de la falta de empleados, faltaban medios, principalmente para la digitalización de los procesos", José Abraão, secretario general del Sindicato de Trabajadores de la Administración Pública le dijo a DN.

La abogada Fabiana Azevedo tiene muchos procesos en sus manos en cuanto a la adquisición de la nacionalidad portuguesa y dice que nunca habían tardado tanto en completarse: "Tardan entre 24 y 29 meses en completarse".

Los datos de 2022 aún están por cumplirse, pero el año pasado el IRN concedió la nacionalidad portuguesa a 133.874 extranjeros, principalmente brasileños y sefardíes, estos últimos con más de 50.407 solicitudes. Completan el top 5 los de Cabo Verde, Angola y Guinea-Bissau.

Refuerzo de servicios

Junto a la Oficina de Registro Central, en Lisboa, los servicios del Archivo Central de Oporto ahora pueden recibir y procesar estas solicitudes. "Se abrieron 17 ventanillas de nacionalidad en los Registros Civiles de Amadora, Aveiro, Braga, Coimbra, Évora, Faro, Guarda, Guimarães, Lisboa, Oliveira de Azeméis, Ovar, Pombal, Santarém, Torres Vedras, Vila do Conde, Vila Nova de Gaia y Viseu”, dijo a DN el MJ, al tiempo que se crearon 24 centros para analizar los procesos de los descendientes de sefardíes portugueses.